miércoles, 1 de mayo de 2019

1 de Mayo- Feliz día del Trabajador y San José Obrero y Santa Mafalda de Portugal y San Peregrino Laziosi y San Jeremías







COLOCAR PAPEL PINTADO
 Para colocar fácilmente el papel pintado, podemos preparar la pared dando una mano de cola antes de empezar. Después, se encola el papel y se dobla de forma que queden las dos caras que se han encolado enfrentadas. Cuando se coloque el papel sobre la pared, sólo se necesitará soltar uno de los bordes e iniciar el pegado. Uno de los problemas más frecuentes es la aparición de burbujas. He aquí algunas soluciones: las burbujas pequeñas desaparecen cuando el papel se tensa y se seca. Otros casos, como la aparición de grumos o cola mal repartida, pueden solucionarse con un simple pinchazo con un alfiler, o con un corte en forma de cruz.

 DESPERDICIOS CASEROS COMO ABONOS
Los desperdicios que se producen en la casa son una excelente y económica materia prima para preparar abonos, que pueden ser utilizados en las plantas de interior y exterior: Los restos de vino que quedan en las botellas, mezclados con agua, sirven para regar todo tipo de plantas. También puede utilizarse el agua que ha servido para cocer huevos duros, así como las propias cáscaras de los huevos machacadas, que aportan carbonato cálcico a la tierra desnutrida. Las plantas obtendrán brillo y belleza si se las riega, cada tres meses, con agua y los posos del té o los del café, mezclados con azúcar.

EL TRUCO DE LA ABUELA
 Los cactus son plantas muy delicadas y sensibles al exceso de agua. Para regarlos, lo mejor es utilizar una jeringuilla que introduciremos en la tierra hasta la raíz. Así, sólo absorberá el agua que necesite realmente.

FLORES BELLAS PARA SIEMPRE
 Para que las flores no se pudran en el florero, deberemos cambiar el agua de vez en cuando. Si el florero es de boca estrecha y no se puede acceder al fondo para limpiarlo bien, conviene entonces llenarlo con agua caliente, un detergente y un poco de arena; luego, removeremos bien la mezcla, para que se deshaga así la suciedad que haya podido formarse. De todas formas, una solución para conservar el agua en buen estado consiste en añadirle unas gotas de lejía o un trozo de aspirina.

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