San Antonio el Grande y San Marcelo de
Die y Santa Rosalina
Seda siempre blanca
Las prendas
de seda blanca suelen envejecer con
facilidad, adquiriendo un tono amarillento. Para recuperar su color
original sólo hay que dejar la prenda en remojo, durante una hora, en un
recipiente con agua y diez gotas de agua oxigenada. Los resultados son sorprendentes
Mármol impecable
Dirá adiós a
las manchas de los mármoles de su cocina si echa sal sobre un limón partido por
la mitad y frota con él suavemente la superficie. A continuación aclare con
abundante agua y su mármol quedará impoluto.
Labios hidratados
Si sus labios
están resecos y descamados, cúbralos con una capa de pasta de dientes y déjela
actuar durante diez o doce minutos. Después retírela con abundante agua fría a
la vez que frota los restos con las yemas de los dedos. Quedarán perfectos y
listos para ser maquillados a su gusto.
Lima improvisada
Si se le ha
roto una uña y no tiene a mano una lima, puede resolver este pequeño incidente
enseguida. Un simple azucarillo realizará la misma función que la lima en casos
imprevistos. La uña afectada quedará tan lisa como si hubiera usado el
instrumento de manicura y podrá, así, despreocuparse de posibles enganchones en
sus prendas preferidas.
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