El
colorete, en su sitio
Antes
de aplicar el colorete en tus mejillas, sonríe, y pasa la brocha por la parte
del pómulo que sobresale. Para matizar el exceso de color si queda exagerado,
pasa una brocha limpia por rostro y cuello, en sentido ascendente.
Dedal
inamovible
Si
te gusta coser con dedal, pero odias que se resbale en tu dedo, prueba a
ponerle un poquito de bicarbonato. Así permanecerá en su sitio.
Acero
inoxidable y brillante
Para
devolver el brillo a las baterías de cocina, frótalas suavemente con un trapo
previamente humedecido en una mezcla de medio litro de agua, y tres cucharadas
soperas de maicena.
Helados
caseros
Llegan
las calores, y a todos nos apetece un heladito. Si prefieres los hechos por ti
misma, en casa, recuerda que te quedarán con una textura muy suave si en su
elaboración utilizas miel liquida en lugar de azúcar.
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